17 Mar Cómo cepillarse los dientes

Cepillarse los dientes es muy importante porque ayuda a eliminar la placa y las bacterias. Éstas se forman de manera continua en los dientes y alrededor de las encías. La placa puede provocar caries, deterioro de los dientes e incluso enfermedad periodontal. Por eso hay que eliminarla con regularidad. Una técnica de cepillado adecuada puede proteger los dientes de las caries y las enfermedades. Además, ¿Sabías que no se debe utilizar casi agua y que hay que utilizar poca pasta para los niños?

De todo esto hablaremos en este artículo y esperamos que te ayuda a mantener tu salud bucodental.

Pasos a seguir al cepillarse los dientes

Material necesario

La forma más sencilla de cepillarse los dientes es con un cepillo de dientes estándar con mango de plástico y cerdas de nailon. El proceso completo debería durar unos 2 minutos. Lo primero que necesitas es tener el material adecuado para un correcto cepillado de dientes. Lo adecuado sería disponer de lo siguiente:

• Cepillo de dientes
• Pasta de dientes con flúor
• Hilo dental
• Enjuague bucal (opcional)

El cepillo de dientes debe sustituirse cada 3 ó 4 meses. Si el cepillo se ha utilizado en exceso, las cerdas pueden deshacerse y el cepillado pierde parte de su eficacia.

El flúor fortalece los dientes contra la caries. Los niños menores de 3 años a los que les hayan salido los primeros dientes pueden utilizar una capa de pasta dental con flúor del tamaño de un grano de arroz. Entre los 3 y lo 6 años se puede empezar a utilizar una cantidad de pasta dental con flúor del tamaño de un guisante. También existen pastas dentífricas especiales sin flúor para los niños más pequeños si te preocupa que se traguen la pasta.

Proceso de cepillado

1. Lubrica el cepillo con una muy pequeña cantidad de agua. Pon una pequeña cantidad de pasta de dientes en la cabeza del cepillo.
2. Introduce el cepillo en la boca en un ángulo de 45 grados respecto a las encías y cepilla los dientes delanteros con movimientos suaves y cortos.
3. Cepilla las superficies exteriores de los dientes, asegurándote de alcanzar las muelas posteriores y las zonas superiores de las superficies de masticación.
4. Dale la vuelta al cepillo para que te llegue a la superficie interior de los dientes delanteros superiores. Dale la vuelta para conseguir la superficie interior de los dientes delanteros inferiores.
5. Cepilla la lengua para eliminar cualquier acumulación de bacterias o placa que se haya quedado pegada allí durante el proceso de cepillado.
6. Escupe los restos de pasta de dientes, saliva y agua en un fregadero limpio. Termina enjuagándote la boca con agua fría.

Problemas derivados de no cepillarse los dientes correctamente

Tener los dientes bien limpios es importante en la vida diaria. Como ya hemos comentado, si no llevas una higiene dental adecuada.

Las bacterias empiezan a formar la capa de biofilm en tan sólo dos horas después del cepillado. Después de 48 horas, esta biopelícula se fortalece, convirtiéndose en una placa dental más gruesa. Esta placa sólo puede eliminarse mediante una limpieza mecánica con un cepillo de dientes. Si la placa permanece demasiado tiempo en los dientes, puede provocar numerosos problemas, como caries, gingivitis o incluso periodontitis.

La única manera de evitar estos desagradables problemas es limpiar los dientes correctamente, incluyendo los lugares de difícil acceso como las líneas entre las encías y los dientes donde a la placa le gusta instalarse.

Comprobaciones al cepillarse los dientes

Una de las cosas que debes hacer siempre es comprobar si tu boca está realmente limpia. Será entonces cuando sepas si has hecho un cepillado correcto o debes cepillarte los dientes de nuevo. Para ello deberás hacer una serie de comprobaciones:

El cepillo interdental

Hay lugares a los que no se puede llegar con un cepillo convencional. Para comprobar si tus espacios interdentales están limpios, puedes utilizar un cepillo interdental. Sólo tienes que introducirlo entre tus dientes y sacarlo. Si está cubierto de una sustancia blanca y blanda, se trata de la placa dental. Para eliminar esta placa y evitar el mal aliento, las caries y las enfermedades de las encías, limpia tus espacios interdentales a diario.

Prueba del aliento

Si el olor de tu aliento no es de tu agrado es posible que sea porque no has realizado un cepillado correcto. Asegúrate de llegar a todos los lugares difíciles de tu boca. La causa de un aliento poco fresco podrían ser los microorganismos de la placa dental. Éstos producen compuestos sulfurosos olorosos que los estudios han identificado como una de las principales causas del mal aliento.

Prueba de la lengua

Puedes hacer la prueba de la lengua. Esta comprobación consiste en pasar la lengua por todas las superficies de los dientes. Si tus dientes están tan suaves como el cristal, has hecho un buen trabajo de cepillado. Si algunas zonas aún se sienten un poco ásperas, debes cepillarlas otra vez.

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